05 febrero 2018

No es que no te quiera, es que estoy trabajando


Recuerdo muy bien mi etapa 18añera, estudiaba diseño de modas y juraba que respiraría el mismo aire que Voldemort respirara. Recuerdo que él decidió dejar la escuela y dedicarse a trabajar. Recuerdo que sus horarios laborales tan poco convencionales causaron que yo me volviese loca e irracional.

Fue gracias al desastre en que se convirtió la relación que tuve con Voldemort; las ojeras tras tanto desvelo laboral de HC, que me hicieron ser una persona relajada cuando de temas laborales se trata.

En la actualidad, entiendo que sólo era una persona con tanto tiempo libre que no supe aprovechar, y sobre todo, entiendo que trabajo es trabajo, y que si has decidido estar ahí porque te apasiona y te da de comer, habrá ocasiones en que éste sea primero que todo, incluso primero que la relación en turno.

Hoy me anunciaron que mi nuevo horario involucra olvidarme de mis sábados, trabajando de 9:00AM a 9:00PM, y aunque pudiese parecer que me estoy arrancando el cabello, la verdad es que ando de lo más feliz, ya que amo dar clases como no tienen idea, y pues a nadie le cae mal dinero extra, pero no puedo evitar preguntarme:

¿Se puede mantener una relación y un trabajo sin morir en el intento?

Últimamente, hablando con amigos que tienen pareja sentimental (novio/novia), he caído en cuenta que todos andan igual (por lo menos lo que no tienen un trabajo Godín/convencional), con el trabajo hasta el tope, creciendo laboralmente y malabareando con sus parejas, amigos y/o ejercicio.

Como toda obsesiva compulsiva, hoy hice un listado de las cosas que tenía que hacer, entre el trabajo, ejercicio, menesteres del hogar y mi tiempo de ocio, tocó cancelar mi salida semanal al cine, y pues la verdad no es que no lo quiera hacer, sólo que estoy trabajando, y como una vez lo dije, a mí nadie me dijo que ser adulto sería así, pero toca pagarlo, o mejor dicho, trabajarlo.

Y bueno, tal vez no es tan difícil, tal vez sólo es cuestión de ser paciente, de saber organizarse, de elegir a la persona correcta, de poner las cosas en claro, tal vez, sólo tal vez, hasta cierto punto, es necesario una pareja sentimental que te envíe un momazo para reconfortarte el día tras tanto estrés laboral, como me dijo Mr.Perfect hace unos días.

Nos vemos en el próximo post.



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