08 mayo 2016

Girls "I Love You Baby" 5x10

Ya han pasado dos semanas desde el fin de temporada de Girls, y como les había comentado, no quería perder la oportunidad de hablar de este hermoso final.

Específicamente quiero hablar de Hannah Horvat, quien se ha caracterizado por ser un personaje complicado, mimado, arrogante e inmaduro, si eres fan de la serie, sabrás de lo que hablo, y sino lo eres, te bastará con ver un sólo capítulo para entender.

Capítulo tras capítulo, Hannah hace y deshace su vida y la de los demás (quiero aclarar que no estoy en contra de este personaje, es con el que más me identifiqué), hasta la 5ta temporada, donde demuestra una gran dosis de madurez.

Hannah descubre que Adam (su ex novio) está saliendo con Jessa (su mejor amiga), Hannah entra en shock y no quiere saber más de ellos (¿Me identifiqué? ¡Totalmente!), y no fue porque su amiga "rompiera" el código de amigas, sino por dejar que se enterara de esa manera, atando cabos (¿Me sigo identificando? ¡Por supuesto!)

Hannah vuelve a escribir, cosa que había dejado de lado, entra a un concurso de oratoria, "The Moth", donde narra su historia y la termina de la siguiente forma:


Ahora, llevándolo a la vida cotidiana, específicamente a mi vida.

Después de un desfile que tuve que cubrir en mi trabajo, Mr.Grey (así le llamamos mi blogger friend y yo) pasó por mí para llevarme al cine, lucía perfectamente perfecto, y me sentía completamente feliz.

Al llegar al cine bajé antes para comprar algo de comer, y al entrar los vi, Voldemort 2 y la que hacía llamarse mi amiga. Confieso que al verlos me dolió el estómago, siempre soñé toparme con ellos y poder decirles lo que sentía (cabe mencionar que en mi sueño yo manejaba un carro monstruo y los aplastaba), pero no le vi caso, eran felices, se veían bastante felices ¿quién era yo para arruinarles ese momento?

Para hacer ese momento perfecto, llegó Mr. Grey y rodeó mi cintura, felices ellos, felices yo, no tenía caso seguir con niñerías.

Dudo mucho comprarles una canasta de frutas muy costosa, no creo que estén esperando algunas palabras mías a estas alturas (y prefiero gastar ese dinero en unos nuevos zapatos), pero sé que si llego a verlos de nuevo, y esta vez ellos me ven, les daré una sonrisa.

Nos vemos en el próximo post

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Maira Gall